Hackear la cadena de montaje tecnológica (mejorándola)

Participar en el mercado laboral implica ir engranándonos en empresas y equipos que tienen objetivos, culturas e inercias ya establecidas a las que hay que acoplarse. Según nos adaptamos puede que identifiquemos dinámicas que contradigan los valores que creíamos que defendía la organización, que no son justas o que directamente son peligrosas. Encontrar incoherencias entre lo que nuestro centro laboral promulga y lo que hace provoca un malestar que es difícil integrar y suele terminar con la búsqueda de un nuevo empleo o, en el peor de los casos, con la disociación entre nuestra ética personal y nuestra vida profesional ¿Existen solo esas opciones? ¿No es posible influir de forma individual en esas dinámicas perniciosas para mejorarlas? Cada caso es un mundo pero aquí veremos estrategias, tácticas y herramientas en las que inspirarnos si identificamos brechas "hackeables". Al usarlas (tanto si nos quedamos como si nos vamos) mejoraremos el sistema para el resto.